¿Sientes que empezar a entrenar es misión imposible? No estás sola. Si nunca te ha gustado el ejercicio o no sabes por dónde empezar, aquí tienes la respuesta. Vamos a convertir ese “no sé” en un “yo puedo”. Porque entrenar no es una obligación, es un regalo que te haces a ti misma.
No importa si estás pensando en quedarte embarazada, ya lo estás o acabas de ser mamá. Lo importante es que encuentres tu ritmo. Porque moverte no se trata de ser perfecta, sino de sentirte bien contigo misma.
¿Por qué empezar a entrenar?
Primero, cambiemos el chip. No se trata de cambiar cómo te ves frente al espejo, sino de cómo te sientes por dentro. Entrenar tiene que ver con mejorar tu salud, tu energía, tu bienestar emocional y tu calidad de vida. Es un acto de autocuidado. ¿Necesitas más razones? Aquí las tienes:
- Porque el movimiento es salud: Entrenar reduce el estrés, mejora la circulación, fortalece tus músculos y previene molestias comunes como dolores de espalda. Es como invertir en el «mantenimiento» de tu cuerpo para que funcione mejor y durante más tiempo.
- Porque te prepara para cada etapa: Ya sea que estés buscando quedarte embarazada, pasando por un embarazo o en el posparto, entrenar te da herramientas físicas y emocionales para afrontar cada etapa con confianza.
- Porque tú también eres importante: Entrenar no es egoísta, es tiempo para ti. Es tu espacio para cuidarte y recordarte que tu bienestar también es una prioridad.
¿Qué te frena para empezar? (y cómo superarlo)
Sabemos que no es fácil. Pero esas excusas que rondan en tu cabeza tienen más salida de la que crees.
- «No tengo tiempo.» ¿Quién dijo que necesitas dos horas en el gimnasio para entrenar? La clave no está en la cantidad de tiempo, sino en la calidad de ese tiempo. A veces, es suficiente con 15-20 minutos al día para que el entreno sea efectivo. Y lo mejor es que puedes hacerlo en casa, al aire libre o en cualquier lugar.
- «No sé qué hacer.» Es completamente normal sentirte perdida, pero aquí es donde entramos nosotras. Con el acompañamiento adecuado, todo se vuelve más claro y sencillo.
- «No me gusta el ejercicio.» Tal vez lo que no te gusta es el tipo de ejercicio que has probado. Hay muchísimas formas de moverte, y seguro que hay una que se adapta a ti. Pero recuerda: el ejercicio no es castigo, es cuidado.
Lo importante no es hacerlo perfecto, es hacerlo con intención.
Cómo empezar sin agobiarte
1. Construye desde la base: No puedes empezar a correr antes de aprender a caminar, ¿verdad? Lo mismo ocurre con el entrenamiento. El objetivo no es llegar rápido, sino hacerlo bien. Empieza por fortalecer las bases: ejercicios sencillos, movimientos que te hagan sentir bien, y ve aumentando el nivel poco a poco. La paciencia y la constancia siempre ganan.
2. Encuentra el equilibrio entre lo que necesitas y lo que disfrutas: El entrenamiento de fuerza es clave para tu salud, especialmente como mujer, pero eso no significa que no puedas combinarlo con actividades que disfrutes. Bailar, caminar, hacer deportes al aire libre, movilidad… elige algo que te motive, pero sin olvidarte de lo que tu cuerpo necesita para estar fuerte y saludable.
3. Redefine tus objetivos: No todos los objetivos tienen que ser medibles o visibles. Sentirte más enérgica, recuperar la fuerza para cargar a tus hijos y jugar con ellos, o mejorar tu postura son metas igual de importantes. Escucha a tu cuerpo y celebra cada pequeño paso. Al final, el objetivo es sentirte bien contigo misma.
¿Y si no quiero hacerlo sola?
No estás sola. Muchas mujeres sienten que no saben por dónde empezar, y eso está bien. En .be sabemos que cada cuerpo y cada etapa son diferentes. Por eso diseñamos programas personalizados que se ajustan a ti, a tu ritmo, y a tus necesidades.
Sabemos cómo ayudarte a encontrar lo que realmente necesitas, sin presiones y con todo el apoyo que mereces.
Empieza hoy, a tu ritmo
No tienes que esperar a sentirte lista ni al momento perfecto para empezar. Porque el mejor momento para priorizar tu bienestar es ahora. Cada movimiento, por pequeño que sea, cuenta.
¿Te animas? Si no sabes por dónde empezar, déjanos acompañarte. Rellena el formulario, Porque cuidarte empieza con una decisión: ponerte a ti misma como prioridad.
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