Beneficios del ejercicio para la fertilidad
Cada vez son más las mujeres que nos llegan preguntándonos por las “condiciones idóneas” para quedarse embarazada. Y es que la realidad es que es un tema que cada vez preocupa a más mujeres por el aumento de la dificultad de concebir.
Es cierto que la vida no es comparable a la de nuestros padres hace ya unos cuantos años: la edad para concebir era mucho menor, no estaban expuestos a tantos alimentos procesados, el sedentarismo no estaba a la orden del día y vivían con menos estrés. Hoy en día nuestro estilo de vida es más sedentario, comemos peor y estamos sometidos a niveles de estrés laboral más altos, haciendo más difícil la tarea de concebir.
Hay en muchos casos en los que se presentan ciertas patologías que pueden dificultar la concepción de un bebé, pero no debemos olvidar los pilares básicos antes de empezar cualquier tratamiento de fertilidad los cuales mejorarán este entorno y qué ayudará a aumentar la fertilidad de la pareja. ¿Y cómo podemos mejorar este entorno?
La ciencia y los estudios afirman que la alimentación, el ejercicio físico y el descanso juegan un papel fundamental en la fertilidad, sin olvidarnos del estado emocional de pareja que puede suponer un estrés añadido.
Ejercicio físico y otros factores que intervienen en la fertilidad
Existen numerosas investigaciones que demuestran que el ejercicio físico regular fortalece huesos y músculos, ayuda a mejorar la salud y fertilidad de la mujer, e incluso futuro bebé. Además, tiene beneficios a nivel metabólico, cardiovascular y neurológico. El ejercicio controla el colesterol, mejora la calidad del sueño, (de la que hablaremos más adelante) y nuestro estado de ánimo, aspectos que influyen en nuestro sistema reproductor de manera considerable.
Otro factor con mucha influencia a la hora de quedarnos embarazadas es nuestro peso. Si sufrimos de obesidad, puede provocar problemas de ovulación y aumentar el riesgo de abortos espontáneos, algo que con una buena alimentación y rutina de entrenamiento podemos corregir o evitar.
Tampoco debemos dejar de lado la calidad del descanso. Por la noche, al irnos a dormir, generamos la hormona melatonina, la cual nos prepara y ayuda a conciliar un sueño reparador. Los estudios nos dicen que esta hormona tiene un altísimo poder antioxidante, reduciendo el estrés oxidativo de las células dentro del ovocito, así como el producido por los radicales libres mejorando el ratio de fertilización.
Otra hormona que juega un papel fundamental en la fertilidad y que depende del descanso es la hormona del crecimiento. Ésta tiene el pico más alto de segregación en la fase de sueño profundo. Tenemos que volver a incidir no solo en el descanso, sino en la calidad de esta.
¿Y qué puede ayudar a mejorar el descanso y la segregación de estas hormonas? Hablamos de nuevo del EJERCICIO FÍSICO. A través del entrenamiento, del movimiento, mejoramos y fortalecemos los músculos, los cuales se consideran que tienen la capacidad de actuar como órgano endocrino al liberar unas proteínas denominadas miocinas, las cuales inducen cambios tanto en el propio músculo como en otros órganos y tejidos.
Por tanto, el porcentaje muscular presente en el cuerpo está asociado a la cantidad de hormona de crecimiento que se segrega, y es que la población femenina tiene un altísimo nivel de inactividad física siendo mucho más sedentarias que los hombres, teniendo por tanto unos niveles de masa muscular muy bajos, reduciendo la calidad ovocitaria.
Con la hormona del crecimiento también está relacionada la progesterona, la cual mejora la calidad y grosor del endometrio. Recordemos que el endometrio es la capa que recubre por dentro el útero y cuya función es recibir al óvulo fecundado cuando se produce el embarazo. Por tanto, otro motivo más para entrenar.
Tipos de entrenamientos que pueden ayudar a aumentar la fertilidad
El ejercicio moderado de cardio y resistencia puede mejorar la función hormonal y reducir el estrés durante el proceso de concepción. Además, realizar actividad física también tiene un papel fundamental en el aspecto psicológico de la mujer, ya que le ayuda a su estado emocional y de ánimo.
Las rutinas de cardio y fuerza hay que complementarlas con el entrenamiento del Core de cara a quedarnos embarazadas, de esta manera será tu suelo pélvico y transverso abdominal empezará a prepararse para el futuro embarazo. Todos los músculos del suelo pélvico tienen una función primordial para soportar todos los órganos abdominales y estabilizar la columna y la pelvis, por ello el entrenamiento de Core nos ayudará a tener un embarazo más llevadero y puede facilitar el parto. Además, este tipo de entrenamiento también será ventajoso para la recuperación posparto, ayudando a que sea más liviana.
En conclusión, un buen estilo de vida con una buena dosis de ejercicio, buena calidad en el descanso y alimentación nutritiva juegan un papel fundamental en cualquier etapa de la mujer y no hay que dejarlos de lado cuando queremos quedarnos embarazada.
Si es tu caso, no te obsesiones con todo el ejercicio que no hayas hecho antes. Aliméntate bien y de forma equilibrada, y dedica 30-45 min para hacer actividad física durante cuatro o cinco veces por semana. Y si necesitas la ayuda de un profesional, visita nuestra web para ver los diferentes entrenamientos que tenemos para mujer.
Lorena García Gil
