Probablemente sea una de las preguntas que más se repitan las mujeres cuando se quedan embarazadas (sobre todo si se trata de la primera vez). Y es que, practicases o no deporte previamente, cuando te enteras de que estás embarazada te entran mil dudas. Sabes que tu cuerpo va a cambiar, que debes cuidar tu alimentación y que será necesario moverte durante los próximos meses, pero, más allá de dar paseos, las mujeres deben hacer ejercicio de intensidad durante el embarazo.
Afortunadamente, cada vez son más los profesionales sanitarios que, durante la primera consulta obstétrica, recomiendan el ejercicio físico supervisado por un profesional durante los meses de gestación. Y he aquí lo más importante de la recomendación, ya que durante esta etapa cobra especial relevancia el acompañamiento por parte de un profesional para saber qué ejercicio se puede hacer, cómo hacerlo y cómo irlo adaptando a medida que avanza el embarazo.
Es completamente normal que una madre sienta miedo a la hora de hacer ejercicio y quiera evitar riesgos que puedan afectar al bebé. Por ese motivo –y porque su cuerpo va a cambiar a muchos niveles: cardiovascular, respiratorio, muscular, esquelético u hormonal– es importante contar con la guía de un profesional capaz de entrenar a la mujer embarazada, adaptándose a su nueva situación, para obtener los múltiples beneficios que el ejercicio aporta, tanto a la mujer como al bebé.
Y es que, además de ayudar a controlar el aumento de peso durante el embarazo, el ejercicio mejorará el bienestar físico y psicológico de la mujer, le ayudará a encontrarse más activa y contribuirá a luchar contra las afecciones propias del embarazo: dolor lumbar, preeclampsia o diabetes gestacional, entre otros. Asimismo, el entrenamiento durante el embarazo debe estar enfocado a preparar a la mujer para el momento del parto, algo que, dada su gran exigencia física y mental, muchos asemejan a una maratón.
¿Qué cosas debo tener en cuenta a la hora de hacer ejercicio?
- El entrenamiento durante el embarazo debe ser supervisado por un profesional del deporte y salud, tales como los graduados en ciencias de la actividad física y del deporte
- Es conveniente entrenar unos 2-3 días por semana y acompañarlo de ejercicios más ligeros el resto de días de la semana (al menos, será conveniente realizar 150 minutos de ejercicio durante la semana, según apunta la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia).
- El ejercicio deberá ser de intensidad media y se deberá controlar la frecuencia cardiaca en los momentos de mayor intensidad
- Es recomendable realizarse una revisión de abdomen y suelo pélvico con un fisioterapeuta especializado.
¿Es bueno cualquier tipo de ejercicio?
Siempre que no esté contraindicado por el médico, la mujer embarazada deberá hacer ejercicio controlado. Eso sí, no cualquier ejercicio es conveniente durante su estado. Por eso, además de contar con la ayuda de un profesional, será importante evitar:
- Ejercicios de alto impacto
- Deportes de riesgo (parapente, puenting, paracaidismo…)
- Deportes de contacto (boxeo, judo, kárate, etc.)
- Deportes bajo el agua (submarinismo, buceo, etc.)
En definitiva, el ejercicio durante el embarazo es fundamental y los beneficios son múltiples, tanto para la mujer como para el bebé. Además, nos ayudará en el momento del parto como en la recuperación posparto, ya que nuestro cuerpo estará preparado para ese momento. Por ello, siempre que tengamos la validación por parte de nuestro médico y siguiendo las recomendaciones anteriormente señaladas, el entrenamiento en el embarazo conllevará numerosos beneficios para la mujer.